La creación de culturas empresariales atractivas

La creación de culturas empresariales atractivas La creación de culturas empresariales atractivas
Business Review (Núm. 251) · Recursos humanos

Glengarry Glen Ross. Éxito a cualquier precio es un filme dirigido por James Foley, y protagonizado por Al Pacino, Ed Harris, Jack Lemmon, Kevin Spacey, Alec Baldwin, Alan Arkin y Jonathan Pryce, en el que queda reflejado de qué son capaces algunos vendedores para lograr ser los mejores de la empresa. Esta joya del cine y de la psicología humana muestra la profunda deshumanización de los personajes, fruto del estilo de liderazgo centrado en los resultados y no en las personas y de las características de las herramientas de gestión empleadas. El deterioro de los personajes se muestra desde el principio, y acaba resultando casi violento al final. 

Junto con El lobo de Wall Street, del director Martin Scorsese, esta es una de las películas que mejor consigue transmitir la posible perversión motivacional y conductual de las personas en su puesto de trabajo, y a la vez ofrece pistas de por qué esos deterioros ocurren. El discurso de Alec Baldwin al inicio de la película podría ser el origen de todo lo que sucede en la trama; algo que puede extrapolarse a más de una empresa: la forma de tratar a las personas determinará, en buena medida, cómo estas se van a comportar. Las conductas que un directivo señale como referencia y sean refrendadas por los sistemas de remuneración serán las mayormente reproducidas, salvo que se tope con un empleado con sólidos principios.

Favorecer una cultura empresarial sana Patrick Lencioni, en su libro The Advantage: Why Organizational Health Trumps Everything Else in Business (Jossey-Bass 2012), ofrece muchas pistas sobre cómo propiciar culturas sanas que ayuden a las empresas a ser más competitivas en el mercado. Se trata de conseguir que abunden valores como el compromiso, la colaboración, la comunicación, la predisposición al cambio, la honestidad, etc. La suma de estas conductas, sobre la base de un posicionamiento en el mercado razonable, se puede convertir en una verdadera ventaja competitiva.

Una cultura sana se fomenta con:

1.  Un Comité de Dirección que funcione bien y dé ejemplo de cohesión entre sus miembros.

2.  Claridad de ideas en el Comité de Dirección y la creación de un sustrato intelectual y estr...


Javier García Arevalillo

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Ingeniero de Caminos, investigador y director de Proyectos en la firma de consultoría Huete&col

Luis María Huete

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Profesor de Dirección de Producción, Tecnología y Operaciones en el IESE Business School