Doce requisitos de la adaptabilidad empresarial

Doce requisitos de la adaptabilidad empresarial Doce requisitos de la adaptabilidad empresarial

EP

Eudald Parera

Business Review (Núm. 354) · Estrategia

La adaptabilidad es fundamental para navegar en el mar de incertidumbre que nos rodea. En tiempos de cambios acelerados, los líderes deberían otorgar a esta metacompetencia la importancia que se merece y asegurarse de que sus organizaciones desarrollan las doce habilidades clave para maximizarla.

Vivimos una etapa de cambios radicales que están conformando una nueva revolución industrial. Se trata de un mundo VUCA o BANI acelerado por la introducción de la inteligencia artificial, la robotización, la tecnificación de todo, el Internet de las cosas, la nanotecnología, la domótica, la supercomputación cuántica o nuevos materiales como el grafeno, y condicionado por los nuevos conflictos y la polarización social y política, que se ve alimentada por un alto nivel de desinformación.

¿Estamos preparados? ¿Los liderazgos incorporan las competencias necesarias para el futuro? ¿La sociedad puede digerir y sacar partido de esta revolución? Las prospectivas aportan un poco de luz sobre lo que requerimos, y múltiples voces aconsejan desarrollar competencias como la adaptabilidad, la colaboración y la resolución de problemas para hacer frente a la nueva realidad.

Hemos vivido muchos procesos de cambio, en los que las dificultades para lograr los objetivos marcados generan ansiedad improductiva. La clave, muy clara en la teoría pero bastante olvidada en la práctica, reside en la predisposición y asimilación del cambio por las personas.

El futuro requiere una “adaptabilidad ágil”, que nace de una evolución cognitiva en la que se crea una mentalidad abierta capaz de navegar con tolerancia por la incertidumbre. Se trata de la capacidad para fluir, ajustarse, crecer, responder a los desafíos, anticipar y propiciar cambios que puedan encontrarse en nuestra experiencia vital (personal o profesional), tanto en sus dimensiones cognitivas y conductuales como emocionales. Se trata de una metacompetencia constituida por diferentes conductas o microhabilidades.

Hay evidencias en numerosos estudios y publicaciones que invitan a avanzar por este camino de las habilidades. Expertos como Martin Reeves y Mike Deimler recomiendan hibridar las competencias tecnológicas con las habilidades blandas citadas, pues el resultado es innovación y progreso humano1.

No hay tiempo que perder. Es hora de aprender y actuar, incorporando en nuestro estilo de liderazgo y en nuestros equipos una serie de conceptos básicos: adaptabilidad/inteligencia adaptativa, resolución de problemas/pensamiento crítico y colaboración/mentalidad colaborativa. Este artículo se centra en el primero.

Disponemos de numerosos ejemplos tanto de éxito como de fracaso en el cambio empresarial. La búsqueda de la inmediatez y la falta de cuestionamiento suelen llevar al desastre. Kodak, que no se adaptó a la fotografía digital, y Blockbuster, que no supo dar el salto al streaming, son dos ejemplos de ello.

Las empresas deben estar dispuestas a cuestionar sus modelos tradicionales e invertir en innovación y tecnología. Dos casos de éxito son Siemens y General Electric, que han sabido integrar tecnologías de la cuarta revolución industrial. En este sentido, es crucial que los decisores y sus equipos estén comprometidos con la innovación y el aprendizaje continuo para mantener la competitividad en un mundo en constante evolución.

 

Desmontando mitos

En todo concepto hay matices, especialmente en los que implican comportamientos complejos. Veamos algunos mitos que se han generado sobre la adaptabilidad:

Equivale a flexibilidad. En realidad, va más allá e implica una respuesta proactiva y estratégica a los cambios.

Solo atañe a empresas pequeñas, ‘startups’ e individuos. Resulta fundamental para empresas de todos los tamaños, como demuestran IBM, Microsoft o General Electric.

Es únicamente para tiempos de crisis. Debe estar integrada en la cultura y operaciones diarias de la organización. Y mejor que lo esté antes de que llegue la crisis.

Solo afecta a las nuevas generaciones. Las organizaciones deben fomentar una cultura de aprendizaje continuo para todos y en todos los niveles.

Siempre hay que adaptarse. No es cierto. La adaptabilidad debe ser ética e íntegra. Un ejemplo extremo es la adaptación de empresas a regímenes totalitarios. Múltiples estudios muestran que las empresas que se adaptan a prácticas injustas afrontan consecuencias legales y de reputación. La utilización de software para manipular los resultados de los controles de emisiones, por ejemplo, supuso un escándalo global para Volkswagen.

La adaptabilidad puede fortalecer valores si está alineada con los principios de la organización. Si se cambian los valores, debe explicarse claramente.

 

¿Cómo desarrollar la adaptabilidad?

Lo primero es reflexionar sobre los hilos de efecto-resultado que dificultan y promueven la adaptabilidad:

Cambio > incertidumbre > estrés > ansiedad > sufrimiento

Inteligencia adaptativa > desaprendizaje > habilidades clave > adaptabilidad

En segundo lugar, hay que tener en cuenta que el principio de desaprender implica cuestionar creencias y no ser esclavos de lo aprendido, liberándonos de la cultura dominante y construyendo criterios propios. La neuroplasticidad permite aprender nuevas cosas y desarrollar nuevas competencias.

En tercer lugar, se trata de facilitar el progreso de la inteligencia adaptativa, que se centra en capacidades cognitivas que permiten pensar, entender y aceptar nuevas ideas, dando vía libre al cambio desde la función cognitiva. La corteza prefrontal es el motor de arranque para trabajar las habilidades clave de la adaptabilidad.

La cuarta e imprescindible acción es formar y desarrollar las doce claves de la adaptabilidad (ver el cuadro 1), una metacompetencia que implica diversas habilidades blandas. Es necesario analizarnos a nosotros mismos y a nuestros equipos. Cada persona tiene menos desarrolladas unas que otras, así que el trabajo de entrenamiento deberá ser más intenso en algunas de ellas.

 

claves adaptabilidad

 

1. Mente abierta

Hay que saber escuchar, no quedarse encapsulado entre rigideces. Una mente abierta permite considerar diferentes perspectivas y cambiar de opinión cuando se presentan nuevas evidencias, algo crucial para adaptarse a nuevas situaciones y entornos. Para ser dúctil y receptivo a nuevas ideas, perspectivas y situaciones, es imprescindible estar dispuesto a explorar, escuchar y aprender de los demás, cuestionar nuestras creencias y quizá desaprender. Una mente abierta genera un sentimiento de libertad, una mirada expectante al mundo, con ganas de sorprender y ser sorprendido.

Herramientas para entrenarla:

Practicar la gratitud: al hacerlo, reconocemos lo que hacen los demás y nuestra mente empatiza y se abre.

Utilizar un foco flexible de múltiples soluciones.

Generar un entorno positivo, expectante y vital.

Ejercicios:

Practicar el juego de rol El mundo de los viajeros.

 

2. Flexibilidad

Hay que tener cintura, lo cual permite a las personas ajustar sus comportamientos y estrategias para adaptarse a las circunstancias cambiantes. Se trata de la capacidad de modificar el pensamiento y moverse rápidamente según los desafíos que se presentan. Implica tener una mente abierta y la capacidad de abandonar patrones rígidos para explorar nuevos enfoques.

Herramientas para entrenarla:

Cambiar rutinas.

• Exponernos a diferentes perspectivas.

Practicar la empatía.

Realizar actividades fuera de nuestra zona de confort con mentalidad de aprendizaje.

Ejercicios:

Jugar rápido a “¿Qué harías si…?”.

 

3. Curiosidad

La curiosidad impulsa a las personas a buscar nuevas experiencias y conocimientos, lo cual facilita el aprendizaje continuo y la adaptación a nuevas situaciones. La curiosidad humana es singular. En ella son básicas las preguntas ¿por qué? y ¿para qué?

Herramientas para entrenarla:

Escuchar, utilizar preguntas abiertas y explorar temas diversos.

• Leer sobre una variedad de temas y participar en cursos y conferencias.

Practicar nuevos actividades y viajar a nuevos lugares.

Ejercicios:

Juego de los sombreros.

Exponerse a una obra de arte y escuchar interpretaciones.

 

4. Resiliencia

Es la capacidad de afrontar situaciones difíciles y recuperarse, transformándolas en una oportunidad para seguir creciendo. La resiliencia es una habilidad crucial que te permite superar desafíos y adversidades. Consiste en levantarse y volver a intentarlo para seguir con el propósito, avanzar en la vida.

Herramientas para entrenarla:

Desarrollar una red de apoyo y fomentar el networking.

Cuidar de la salud física y mental.

• Utilizar técnicas de manejo del estrés.

Dividir los objetivos para que sean alcanzables.

Aprender de los fracasos.

Ejercicios:

Practicar el reframing (nuevas soluciones para una situación).

 

5. Creatividad

La creatividad y el pensamiento lateral permiten a las personas buscar alternativas para encontrar soluciones innovadoras y formas de abordar problemas diferentes. Llama la atención la simbiosis entre la creatividad y la adaptabilidad: sin pensamiento creativo no hay nuevas soluciones para adaptarse, y sin adaptabilidad es más difícil poner en marcha la creatividad.

Herramientas para entrenarla:

Practicar la curiosidad activa.

• Fomentar el pensamiento divergente y conectar ideas dispares.

Escuchar activamente, prestando atención a las necesidades de los demás.

Ejercicios:

Brainstorming.

Juego de los sombreros.

 

6. Asertividad

La asertividad es el estilo de comunicación que mejor permite expresar necesidades de manera efectiva, sin lesionar al otro interlocutor, pero mostrando nuestro criterio para persuadir y conquistar. Resulta muy importante para adaptarse a diferentes contextos sociales. La comunicación efectiva predispone a entender las diferentes posiciones y facilita la integración y compenetración de estrategias, logrando un mayor grado de adaptabilidad en todas las partes.

Herramientas para entrenarla:

Practicar la atención plena.

Hablar sobre qué necesitamos para entender el cambio.

Decir “no” de manera respetuosa y con interés genuino por las nuevas propuestas.

Enfocarse en encontrar soluciones que beneficien a las partes involucradas.

Ejercicios:

Entrenar respuestas con tarjetas situacionales.

Formación en comunicación asertiva.

 

7. Tolerancia a la incertidumbre

La incertidumbre es no conocer, carecer de información completa y satisfactoria, a lo que en algunas ocasiones se añade la ambigüedad al existir diferentes visiones y posibles soluciones, lo cual no evita que nos sintamos en la oscuridad. Necesitamos estar predispuestos a ver cualquier faro de luz que nos invite a seguir el rumbo más adecuado, sin miedos. Tolerar la incertidumbre, incluso apreciarla, es una predisposición que se nutre de inteligencia adaptativa, el principio de desaprender y un sentimiento de esperanza, al visualizar la incertidumbre como un espacio de oportunidades en el que aprender y crecer.

Herramientas para entrenarla:

Identificar miedos y creencias limitantes para moldear el estrés.

Abrazar lo desconocido: a veces no sabemos qué podemos aprender.

Tener paciencia: vale la pena esperar a disponer de la información para tomar decisiones tan informadas como sea posible.

Practicar la flexibilidad mental.

Ejercicios:

• Debates con puntos de vista o-puestos en situaciones complejas.

 

8. Versatilidad

Minería de soluciones aplicadas. Se diferencia de la flexibilidad en que es la capacidad de ajustarse. Requiere conocimientos y distintas habilidades, y es clave para hacer realidad la adaptabilidad. Se ve favorecida por los liderazgos abiertos y democráticos.

Herramientas para entrenarla:

Siempre sentirse responsable y aportar valor y soluciones.

Proponer decisiones a partir de nuestras experiencias.

Motivar y guiar sea cual sea nuestro cargo.

Ejercicios:

Teatralizar diferentes roles, aportando soluciones en cada nueva situación que se proponga.

 

9. Optimismo inteligente

Es el optimismo que se basa en una visión realista y equilibrada de la vida. Reconoce las dificultades, pero mantiene una actitud positiva y proactiva para afrontarlas y saber ver las oportunidades. Al mantener una actitud positiva y realista, el optimismo inteligente facilita la adaptación a situaciones difíciles.

Herramientas para entrenarlo:

Desarrollar la autoconfianza, hallando oportunidades en los desafíos.

Practicar la gratitud: hay que agradecer las cosas positivas de la vida para fortalecer nuestras relaciones y generar un ambiente positivo que nos apoye.

Establecer metas realistas, planificando con realismo y definiendo objetivos SMART.

Ejercicios:

Afrontar situaciones para descubrir oportunidades.

Diario de gratitud.

 

10. Toma de decisiones optimizada

El proceso de elegir entre varias opciones se ve dificultado en contextos VUCA por la incertidumbre. Una buena toma de decisiones y el pensamiento crítico implícito son esenciales para la adaptabilidad porque permiten evaluar opciones, reconocer cambios, resolver problemas, fomentar la innovación, gestionar riesgos, aprender y mantener la ética y los valores.

Herramientas para entrenarla:

Analizar el proceso.

Consultar a los equipos.

Gestionar el tiempo.

Practicar y aprender de cada decisión propia o de otros.

Ejercicios:

Juegos de mesa con situaciones de emergencia.

 

11. Orientación al logro

La orientación al logro, sin excusas, lleva a las personas a establecer y alcanzar metas, algo esencial para prosperar en diferentes contextos. No luchar o buscar lo cómodo desincentiva la adaptación. En cambio, tener un propósito claro motiva y reorienta tanto esfuerzos como procedimientos. Esto facilita una adaptabilidad que es el lubricante para alcanzar objetivos a partir del reskilling o upskilling cuando sea necesario.

Herramientas para entrenarla:

Plantear metas factibles y bien definidas, que se deben rectificar con agilidad si hay cambios en el entorno o la información.

Buscar feedback continuo que justifique los cambios.

Autoevaluarse para readaptar procesos, hitos y conductas y aprender de fracasos.

Ejercicios:

Torre de papel.

Taller de metas SMART.

Mapa de la isla desierta.

 

12. Autorregulación emocional

Es imprescindible buscar el sentido, equilibrio y armonía de nuestras conductas. Esta habilidad permite a las personas equilibrar los diferentes aspectos de su vida, y resulta crucial para surfear por el bienestar general con menos estrés, fomentando la inspiración y la creatividad a partir de la paz y la serenidad.

Herramientas para entrenarla:

Practicar la atención plena y la meditación, cuidando la respiración.

Encontrar momentos para relajarse y gestionar las emociones y el estrés, a partir de visualizaciones positivas y esperanzadoras.

• Conectar con la naturaleza (pasear por el bosque, contemplar el cielo…).

Ejercicios:

Sesiones de meditación guiadas.

Caminatas por el bosque.

 

Manos a la obra

Como recogen múltiples investigaciones, la evidencia científica indica que entre el 50% y el 70% de las iniciativas de gestión del cambio fracasan. Entre las causas que se suelen apuntar se incluyen la falta de adaptabilidad en el liderazgo, la resistencia al cambio, una comunicación inadecuada o la falta de alineación y planificación. Por eso vale la pena tener en cuenta los beneficios de la adaptabilidad en cada fase del modelo de gestión de cambio de John P. Kotter2.

Para empezar, hay que tener en cuenta que crear una sensación de urgencia sin adaptabilidad puede ser interpretado como imposición. A menudo se olvida explicar la necesidad del cambio, algo esencial para activar la inteligencia adaptativa y desarrollar la adaptabilidad. Además, al comunicar la visión, es necesario adaptarse al grado de aceptación del cambio, que varía por departamento, líder, organización y país. En este sentido, una comunicación inadecuada puede generar confusión y resistencia.

Por otra parte, empoderar a los empleados para que actúen y difundan la visión es clave. Y si son capaces de adaptarse, podrán tomar decisiones autónomas, fomentar la innovación y mejorar la eficiencia del cambio.

También debemos considerar que la adaptabilidad permite identificar y celebrar logros rápidamente, ajustando las estrategias según los resultados, y que diversos modelos señalan que el olvido en la formación y desarrollo de la adaptabilidad puede llevar a fracasos en la implementación de la gestión del cambio.

El verdadero objetivo de todo proceso de cambio no es solo introducir una nueva máquina, tecnología o estrategia, sino que toda la organización disfrute de una cultura corporativa flexible y adaptable, que sea capaz de seguir aprendiendo.

 

El valor para las organizaciones

Al fomentar la adaptabilidad, las empresas pueden mejorar su eficiencia, reducir costes y tomar decisiones más informadas. Esta metacompetencia ofrece diferentes tipos de beneficios:

Económicos. Según McKinsey, la adaptabilidad puede aumentar la productividad un 20-30%3. Además, Martin Reeves y Mike Deimler hallaron que las empresas adaptables toman decisiones un 30% más rápido y con un 25% menos de errores4.

Sociales. La adaptabilidad mejora la cohesión del equipo. Gallup publicó que la adaptabilidad y la colaboración aumentan un 21% las probabilidades de tener equipos comprometidos5.

Medioambientales. La adaptabilidad abre la mente a nuevas estrategias que pueden parecer no vinculadas con la actividad, pero que al final aumentan el aprendizaje y el compromiso. Según el Foro Económico Mundial, gracias a esta capacidad se puede reducir la huella de carbono un 20-30%. Patagonia, por ejemplo, lo ha hecho un 25%6.

 

Cómo detectar talento con capacidad de adaptación

Está claro que los profesionales capaces de adaptarse rápidamente a los cambios y aprender nuevas habilidades tendrán una ventaja competitiva significativa. De hecho, como apunta un estudio de McKinsey, “la adaptabilidad se ha convertido en una habilidad clave que los empleadores buscan en los candidatos”7.

Aunque la medición de habilidades puede parecer difícil, existen herramientas como el Myers-Briggs Type Indicator o el modelo de los cinco grandes rasgos de personalidad que permiten identificar tendencias y características relacionadas con la adaptabilidad. De hecho, detectar la adaptabilidad del talento es esencial para crear equipos resilientes y capaces de afrontar los desafíos del futuro.

En una entrevista, las preguntas relativas al comportamiento y los escenarios hipotéticos pueden proporcionar información valiosa sobre la capacidad de adaptación de un candidato. Además, los test de personalidad y de resolución de problemas pueden ofrecer una visión detallada de las características y habilidades relacionadas con la adaptabilidad.

Por otra parte, ya en una relación personal, la observación de conductas y las conversaciones sobre experiencias pasadas pueden revelar cómo una persona maneja el cambio y la incertidumbre.

 

Conclusión

La adaptabilidad es una competencia esencial para el éxito y la sostenibilidad a largo plazo de cualquier organización. Al incorporarla en los procesos de cambio, las organizaciones pueden mejorar su capacidad de respuesta y resiliencia, asegurando su éxito en un entorno empresarial en constante evolución.

Desarrollarla no solo beneficia a la organización, sino que también contribuye al bienestar y la satisfacción de los empleados, creando un entorno de trabajo más innovador, saludable y productivo.

En tiempos de cambios radicales, los líderes empresariales y sociales deberían reconocer su importancia y fomentar una cultura de adaptabilidad a través de programas de formación, su incorporación en los procesos de cambio desde las fases iniciales y su medición.

 

Referencias
1. y 4. Reeves, M. y Deimler, M. (2011). “Adaptability: The New Competitive Advantage”. Harvard Business Review, julio-agosto de 2011.
2. Kotter, J. P. (2007). “Leading Change: Why Transformationn Efforts Fail”. Harvard Business Review, enero de 2007.
3. y 7. Lund, S., Madgavkar, A., Manyika, J., Smit, S., Ellingrud, K., Meaney, M. y Robinson, O. (2022). The future of work after COVID-19. McKinsey & Company.
5. Gallup (2022). State of the Global Workplace 2022 Report: The Voice of the World’s Employees.
6. Foro Económico Mundial (2023). Future of Jobs Report 2023.

Eudald Parera

Profesor colaborador en CESIF, AEFI, Universidad de Andorra, Universidad Europea y HS Estudios Farmacoeconómicos ·