Eric Kirzner: Todo lo que debe saber sobre los asesores robotizados

Eric Kirzner: Todo lo que debe saber sobre los asesores robotizados Eric Kirzner: Todo lo que debe saber sobre los asesores robotizados

KC

Karen Christensen

Business Review (Núm. 281) · Estrategia

¿Qué opciones hay disponibles en la actualidad para alguien que quiera invertir parte del dinero que tanto esfuerzo le ha costado obtener?

Los inversores de hoy día tienen varias opciones. Primero, pueden abrir una cuenta discrecional, en la que le se le da el dinero a un administrador de fondos que toma las decisiones por ellos. Simplemente tienen que rellenar un formulario, indicando sus objetivos y el riesgo que quieren asumir, y luego confiar en que el administrador del fondo tome las decisiones que correspondan.  

También podrían invertir en un “fondo de inversión mancomunado”, como Gluskin Sheff o Leith Wheeler (tipos de fondos de inversión canadienses), o tratar con un corredor de bolsa de servicio completo. Ese es el método tradicional con el que crecí: abres una cuenta de inversiones y se le paga al agente una comisión o una tarifa, y luego él negocia con un asesor de inversiones que hace una serie de recomendaciones, que tú tienes que ratificar.

También se puede abrir una cuenta de corretaje de descuento, en la que eres tú el que toma todas las decisiones y pagas una comisión muy baja  a la empresa. O bien, se podría ir aún más lejos por ese camino y hacer operaciones en Internet completamente por tu cuenta, que es lo que yo hago. Básicamente, abres una cuenta con uno de los grandes bancos o empresas que ofrecen esta opción y tomas todas las decisiones. En cuanto a las tarifas, pagas algo así como entre 4,99 y 9,99 dólares por transacción, por lo que los costes son realmente bajos; pero debes saber absolutamente lo que estás haciendo.  Finalmente, la forma más novedosa de invertir es usar un asesor autómata. Se trata de asesores financieros que brindan asesoramiento o gestión de inversiones a través de Internet, con intervención humana mínima. Una vez que has señalado una serie de datos financieros –tus circunstancias, objetivos, horizonte de inversión y riesgo que admites–, el “asesor” digital te presenta una serie de carteras de inversión para elegir. Eliges una y le pagas a la empresa cincuenta o cincuenta y cinco puntos básicos [la centésima parte de un punto porcentual, como en la prima de riesgo. N del T.] para que haga por ti el rebalanceo de la cartera de inversión.


¿Son los asesores robotizados un modelo comercial que lo vaya a cambiar todo? El concepto no es nuevo, pero sí lo llamaría un negocio transformador, en el sentido de que están compitiendo con ...


Karen Christensen

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Editora de Rotman Management