Decálogo para afrontar la crisis arancelaria

Decálogo para afrontar la crisis arancelaria Decálogo para afrontar la crisis arancelaria
Business Review (Núm. 358) · Estrategia

El nuevo escenario geopolítico ha desencadenado una guerra de aranceles que ha puesto en jaque a muchas cadenas de suministro. ¿Cómo sobrevivir al turbulento entorno actual? Ofrecemos un decálogo que exige combinar la visión estratégica a largo plazo con una gestión ágil de la cadena de suministro para que las empresas españolas mantengan su competitividad en un mundo de creciente incertidumbre comercial.

En abril de 2025, el panorama comercial mundial experimentó un cambio drástico. Estados Unidos impuso aranceles gene-ralizados del 10 % a la mayoría de las importa-ciones, que luego aumentaron hasta el 25 % para bienes de unos sesenta países, alegando una emergencia nacional. Con China, los aranceles llegaron a superar el 140 %.

Estas medidas marcaron un giro proteccionista sin precedentes recientes, elevando el promedio arancelario estadounidense a niveles no vistos desde la década de 1930. La reacción internacional fue inmediata. Socios comerciales clave como China, Canadá y la Unión Europea anunciaron contramedidas, generando temor a una guerra comercial prolongada. Los mercados financieros registraron fuertes caídas, reflejando la preocupación por el posible impacto económico global de esta “crisis arancelaria”.

Para las empresas globales, especialmente las europeas, este nuevo entorno representa una ruptura con décadas de creciente liberalización comercial. Las cadenas de suministro globales, optimizadas para bajos costes y flujos sin fricciones, ahora se enfrentan a aranceles súbitos que encarecen insumos y productos finales. En este contexto volátil, los directivos deben reevaluar estrategias y tomar decisiones con agilidad.

En cuanto a la afectación a la economía española, hay que tener en cuenta que la mayor parte de su comercio exterior se produce dentro de la UE (Francia, Alemania, Italia, Portugal), aunque España también tiene relaciones comerciales significativas con Estados Unidos y China.

Sus principales exportaciones (automóviles, productos farmacéuticos, maquinaria, alimentos y bebidas) reflejan una base diversificada. Sin embargo, existen vulnerabilidades que afectan a las cadenas de suministro, como la necesidad de importar energía, la dependencia de la industria automovilística de cadenas globales que pueden alterarse y el hecho de que sectores tradicionales como el textil o el agroalimentario puedan sufrir barreras arancelarias en mercados clave. Otro problema es la dependencia de las grandes tecnológicas norteamericanas y chinas, lo cual desincentiva el desarrollo tecnológico propio y hace que las cadenas sean más vulnerables a crisis de suministros.

Por otra parte, el alto endeudamiento público y la necesidad de crecimiento sostenido en la UE limitan el margen de maniobra ante disrupciones en los esquemas arancelarios internacionales.

Frente a estos ret...


Sebastián Bruque Cámara

Profesor del área de Organización de Empresas en la Universidad de Jaén ·

José Moyano Fuentes

Profesor del área de Organización de Empresas en la Universidad de Jaén ·

Steven Carnovale

Profesor y director del programa de máster en Gestión de la Cadena de Suministro en Florida Atlantic University ·