La prevención sigue siendo la mejor defensa

La prevención sigue siendo la mejor defensa La prevención sigue siendo la mejor defensa

RD

Rosa Díaz

Management & Innovation (Núm. 50) · TIC

Ante un uso más intensivo de lo digital por parte de las organizaciones, crece la necesidad de la ciberseguridad para proteger esas prácticas. Por ello, la seguridad informática nunca debería entenderse como un coste, sino como una inversión empresarial ineludible, especialmente en un momento en el que las organizaciones pueden beneficiarse de las enormes oportunidades que les ofrece la digitalización

Nadie puede negar que el escenario de juego ha cambiado en los últimos años. Sin duda, vivimos en un mundo totalmente conectado, en el que la transformación digital se ha visto notablemente acelerada con la llegada de la pandemia y en el que ya no hay vuelta atrás.

Las empresas operan cada día en un entorno más digitalizado, donde entran en juego nuevas tecnologías como la inteligencia artificial o la hiperconectividad que conlleva el 5G. Este cambio no es nuevo. Hablamos de un proceso que arrancó hace unas décadas, pero que en los últimos años se ha disparado por la normalización del uso del comercio electrónico y por el teletrabajo.

Si algo nos ha enseñado la historia es que todo gran avance conlleva consecuencias paralelas. Así, este contexto ha incrementado lo que se denomina “superficie de riesgo”; es decir, a mayor uso de la tecnología, mayor espacio para la aparición del ciberdelito o las ciberamenazas, y, por lo tanto, una mayor necesidad de garantizar la seguridad digital para sus usuarios. En otras palabras, ante un uso más intensivo de lo digital por parte de las organizaciones, crece la necesidad de la ciberseguridad para proteger esas prácticas. Por ello, y entre otras acciones, desarrollar acciones formativas y soluciones tecnológicas será la cuestión más importante que tiene que llevar a cabo cada organización para mitigar los riesgos en ciberseguridad asociados a estos avances.

 

Un cambio operativo y vital ¿Hemos hecho bien los deberes para adaptarnos con la suficiente seguridad a este nuevo escenario? ¿Apostamos por la ciberseguridad como un elemento vital para garantizar el éxito de nuestros negocios? La respuesta, sin duda, es afirmativa, pero con matices. Hemos de recorrer aún un camino en el que no solo hemos de seguir mejorando, sino que también hemos de lograr que se incorporen a esta senda aquellas empresas que aún no han dado este paso tan importante. El cambio ya no solo es cultural, es puramente operativo y vital para garantizar la viabilidad y el correcto funcionamiento de todos los negocios.

Las empresas, independientemente de su tamaño y sector, han de asumir que la seguridad digital es ya una capa más que debe estar totalmente integrada dentro de los servicios que prestan. No existe la...


Rosa Díaz

Directora general de INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad) ·