Capital riesgo filantrópico: apoyo financiero a los emprendedores sociales

Capital riesgo filantrópico: apoyo financiero a los emprendedores sociales Capital riesgo filantrópico: apoyo financiero a los emprendedores sociales
Business Review (Núm. 183) · Finanzas

El capital riesgo es una fuente de financiación para emprendedores y empresarios mediante la cual un inversor financiero toma una participación en el capital de una empresa con el objeto de, en un período de tiempo de unos tres a cinco años, ganar unas importantes plusvalías. Desde el punto de vista del inversor, el capital riesgo es un activo financiero con un elevado nivel de riesgo y, por tanto, se espera que tenga un alto nivel de rentabilidad.

La filantropía, por su parte, es el acto de donar dinero, bienes, servicios, tiempo y/o esfuerzo para apoyar causas benéficas, con un objetivo bien definido y sin esperar una recompensa financiera o material. En general, la filantropía engloba cualquier actividad altruista realizada con el objeto de promover el bien o mejorar el nivel de vida de los seres humanos.

Es por esto por lo que hablar de capital riesgo filantrópico parece una contradicción. El capital riesgo quiere ganar dinero, la filantropía es una actividad altruista que no busca recompensa. ¿Cómo es posible que el capital riesgo filantrópico exista? ¿Qué es exactamente? ¿Dónde invierte? ¿Cuál es la diferencia con otras formas de filantropía? Éstas son algunas de las preguntas que tratamos de responder en este artículo, además de dar una visión actual del sector del capital riesgo filantrópico en el mundo.

 

¿QUÉ ES EL CAPITAL RIESGO FILANTRÓPICO? El capital riesgo filantrópico es un fenómeno relativamente reciente y por eso es todavía un gran desconocido. Se puede definir como la aplicación de las técnicas y estrategias del capital riesgo a la financiación de empresas sociales con un alto potencial de impacto social.

Los inversores de capital riesgo filantrópico se dedican a la inversión de fondos provenientes de diferentes donantes, grandes fortunas, empresas o fundaciones, aportando además valor a la empresa receptora de la financiación. El donante se convierte en inversor interesado en aumentar el valor de ésta en términos de impacto social. Para ello, hace un seguimiento y control de la evolución del plan de negocio de la empresa y de sus resultados, y al mismo tiempo la asesora en temas estratégicos, financieros y de reclutamiento de personal clave. Además, pone a disposición de los emprendedores sociales su red de contactos.

La gran diferencia del capita...


Luisa Alemany

Profesora de Management Practice y directora académica del Institute of Entrepreneurship and Private Capital en London Business School ·